Protestas en el marco de la disputa territorial de Senkaku y Diaoyu: el costo de la geopolítica
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Resumen
El presente artículo analiza las protestas anti-japonesas llevadas a cabo en China durante 2012 en el contexto de las tensiones por la disputa territorial de las islas Senkaku/Diaoyu desde la perspectiva geoeconómica. El argumento principal de esta última consiste en una actualización necesaria y pertinente del concepto de las sanciones, dado que ya no se reducen a embargos o bloqueos físicos. Actualmente, varios países participan en las redes de comercio, por lo cual si una de las partes decide interrumpir este ciclo, las otras se ven perjudicadas. La lógica detrás de la perspectiva geoeconómica es la modificación o interrupción intencional de este ciclo con fines coercitivos, cuyo impacto dependerá de la interdependencia económica de las partes involucradas. China es uno de los socios más importantes de Japón. En este sentido, Beijing utilizó el recurso del boicot a través de la destrucción y el bloqueo de productos japoneses de tal forma que Tokio modificara su postura en torno a la disputa territorial. El artículo analiza fuentes primarias, tales como comunicados gubernamentales e indicadores de inversión e intercambio comercial para evaluar el impacto de las medidas impuestas por China. La evidencia muestra que el boicot y las protestas tuvieron un impacto considerable en los indicadores de inversión e intercambio de Japón.