El médico general como primer contacto en usuarios con depresión e ideación suicida

Resumen

La Encuesta Nacional de Epidemiología Psiquiátrica, llevada a cabo en 2003, señala que la prevalencia de depresión en adultos en México en el año anterior a la aplicación de la encuesta fue de 4.5%. Los autores mencionan en cuanto a la cobertura médica de los eventos depresivos, que de acuerdo con los datos de la encuesta, la cifra de mujeres mayores de 18 años de edad con eventos depresivos en el último año fue superior a 2 500 000. De estas mujeres, sólo 27.2% había sido alguna vez diagnosticada como depresiva por un médico y 7.9% había tomado medicamentos antidepresivos en las últimas dos semanas. En el caso de los hombres, poco más de 800 000 mayores de 18 años de edad en el país, habían padecido depresión en el último año. En este caso, el porcentaje de afectados que contaban con diagnóstico médico fue de 19 y el de individuos con tratamiento de 6.1. El antecedente de diagnóstico es más frecuente entre los sujetos que gozan de algún tipo de aseguramiento médico. El 37.4% de las mujeres aseguradas con sintomatología de depresión han sido diagnosticadas, contra sólo 21% en las no aseguradas. En el caso de los hombres con depresión, 28.9% de quienes tienen seguro médico han sido diagnosticados, contra sólo 14% en los no asegurados. Asimismo, los autores mencionan que es común que las personas con trastornos afectivos consulten con médicos generales de manera temprana y que esta demanda no sea atendida de forma eficaz por carencia de capacitación de estos médicos para el diagnóstico y tratamiento de los padecimientos mentales. En el presente estudio, se aplicaron a la muestra (N=151), el Inventario de Depresión de Beck (Jurado, et al. (1998) y el Inventario de Orientación Suicida (Casullo, 2003). Los participantes fueron usuarios de la Clínica Universitaria de Salud Integral (FESI, UNAM), quienes acudían a solicitar servicio a las áreas de Medicina y Psicología. Los resultados muestran que el nivel predominante de depresión fue el Moderado (42.7%). Esta población está en riesgo de desarrollar una depresión severa, lo cual ratifica que esperar el turno en una lista, para recibir tratamiento médico y/o psicológico, no es lo idóneo. Con respecto a la ideación suicida, la prevalencia en la muestra es que la mayoría se encuentra en los niveles alto (36%) y grave (39.2%). Otro hallazgo es que en el nivel Mínimo de depresión, el 5.34% acuden al servicio de Medicina como primer intento. Aunque el 7.63% acude a solicitar servicio al área de Psicología Clínica, de inicio, esto sugiere que al presentar los primeros síntomas, no hay gran diferencia en la preferencia entre ambos servicios. Es por esto que resulta importante que los médicos implementen mecanismos que les permitan diagnosticar de manera eficaz la sintomatología de la depresión e ideación suicida, con el fin de proporcionar un tratamiento oportuno, así como abordar los trastornos mentales desde una visión multidisciplinaria.