La hipótesis de Medea: ¿La vida en la Tierra es a fin de cuentas autodestructiva? de Peter Ward

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Carlos Amador Bedolla

Resumen

La hipótesis de Medea es el contraste de la hipótesis de Gaia, de John Lovelock, que trata de que la vida tiende a ajustar el ambiente la temperatura, el pH del océano, la composición de los gases en la atmósfera en condiciones que permitan su bienestar, el de la vida. La hipótesis de Medea puede formalizarse de la siguiente manera: La habitabilidad de la Tierra ha sido afectada por la presencia de la vida, pero el efecto global de la vida ha sido y será el de reducir la longevidad de la Tierra como planeta habitable. La vida misma, al ser inherentemente darwiniana, es biocida, suicida y crea una serie de retroalimentacio¬nes positivas a los sistemas de la Tierra (como la temperatura global y el contenido de dióxido de carbono y metano) que dañan a las generaciones posteriores. Así que es la vida la que causará su propio final, en este planeta o en cual¬quier otro habitado por vida darwiniana, a través de perturbaciones y cambios de temperatura, de composición atmosférica de los gases o de ciclos elementales que los vuelvan insostenibles para la vida.

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